CELULARES EN LA SALA!

A veces creo que puedo ser exagerado. Y aunque se que el dicho aquel que canta: "Mal de muchos, consuelo de tonto." Pues si, seré tonto, pero me consuela saber que no soy el único exagerado, y me consuela saber que tal vez ni siquiera en verdad, soy exagerado... Exagerando o no, esta entrada podría ser un pliego petitorio. Por favor amable lector, lectora, APAGA TU CELULAR O SILENCIALO, y ahora añado, SI SUENA, NO CONTESTES, Y POR FAVOR, POR FAVOR, POR FAVOR, NO ENVÍES TEXTOS UNA VEZ QUE LAS LUCES DE LA SALA YA SE APAGARON.
Yo se que en estos días a todos no encanta presumir nuestros smart phones, iPhones, y Blackberry. Pero señores y señoras, presuman fuera de la sala de cine! Por favor! A que vas al cine? No puedes ir al cine tranquilamente sin tener que estar pendiente de tu celular, no entres déjalo apagado o en el carro (ese es buen pretexto) No se si no se han dado cuenta o no han querido darse cuenta.
Habemos muchas personas que vamos al cine para disfrutar de toda la experiencia que esto supone: sala oscura, ver la peli en una pantallota, en silencio y disfrutar la pieza de arte que el director y productor (es) intentan presentarnos.
Y es en este casi religioso momento cuando, el de al lado, o el de diez butacas adelante se le ocurre ver quien le llamó, o contestar con un texto... y eso es lo que no se debe hacer. En muchos casos, los mejores, la luz del celular en la sala a oscuras distrae; y en los peores, y dependiendo de la marca de tu teléfono móvil, LASTIMA. Si manejas un auto, y por la noche te han aventado las luces altas me comprenderás, la luz del aparato en una sala a oscuras, distrae y lastima.
En alguna ocasión me tocó estar en una sala medio vacía, yo solito viendo una película, no recuerdo cual. Cuando a dos butacas la señorita revisaba constantemente su celular (tal vez la película le pareció aburrida) cuando a media hora de terminar la película, un Señor de la última fila, le gritó "Ya apaga tu celular! Si tu! apaga tu celular! Que lata has dado con esa luz!" Y (música angelical) me percaté que no era yo el único al que le molestaba dicha luz en cada sala de cine a la que me presento.
Por favor, no lo hagas, no molestes a tus vecinos de butaca y de sala contestando llamadas, ni enviando mensajitos. Evítate y evítanos malos ratos. Disfrutemos todos de la magia que supone ir al cine.
Mi recomendación es que, si vas al cine, trates de ir, sin preocupaciones, dejando al mundo afuera mientras dura tu película. Lo disfrutarás más. Haz la prueba!
Por la sana convivencia de todos en la sala de cine!

Gracias.